La necesidad de un guía y maestro vivo

"Los santos no nacen para sí mismos, sino para la liberación de la humanidad". 

Baba Jaimal Singh

Un Maestro espiritual puede entrenarnos de forma práctica para que sepamos qué esperar en cada paso de nuestro viaje espiritual. Nos da, a través de la conexión que ha establecido con el Absoluto, un impulso para ayudarnos a acceder a la dimensión oculta del alma. Una vez que tenemos este acceso, descubrimos gradualmente que nuestro adepto espiritual está conectado con nosotros como un guía sutil que trabaja a través de la Luz y el Sonido que encontramos en nuestro interior.

Esta es la competencia de un Maestro espiritual perfeccionado. Un guía así permanece a nuestro lado como consejero, para ofrecernos protección y toda la ayuda posible. Puede advertirnos de posibles peligros, señalarnos escollos y proporcionarnos consuelo, aliento y apoyo para asegurarnos de que completamos nuestro curso espiritual.

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La definición del Maestro en palabras de Sant Thakar Singh 

Los Maestros vienen a este plano terrestre con un mensaje especial y un encargo de Dios. A través de tales polos humanos Dios mismo trabaja y transmite Su mensaje sagrado. Tienen el mismo poder que Dios. Son todo misericordia, todo perdón, y perdonan por el bien del perdón.

Los Maestros dejan de lado la ley de la justicia (según siembras, así cosecharás) y se muestran misericordiosos. Aquellas almas que encuentran refugio en ellos no son tomadas a mal, a pesar de sus pecados o de sus muchos errores. Como dijo Cristo: 'Vosotros que estáis cansados y agobiados, venid a mí y yo os aliviaré'.

El alma que acude al Maestro se libera de todos los karmas almacenados y encuentra una salida a la inexorable ley de acción y reacción. El Maestro recibe al alma con todo amor, con todo perdón. 'Dios es amor y el amor es Dios, y el camino de vuelta a Dios es también amor'. Las enseñanzas de los Maestros son sólo un tercio por la boca y los otros dos tercios se aprenden a través de la receptividad.

La espiritualidad no se enseña con la lengua, sino que se capta a través de la receptividad. Y la receptividad comienza con el Maestro. El Maestro tiene tal poder en Él que excava el corazón del iniciado, lo ablanda, lo hace receptivo, y luego lo siembra de espiritualidad. Lo mismo ocurre con la mente. El primer día, el Maestro hace que la mente sea receptiva. 

Entonces abre el ojo interior para ver la luz de Dios y el oído interior para oír el sonido divino. Una vez conectada con la luz y el sonido interiores, el alma, con la guía y la protección del Maestro perfecto, inicia el viaje de regreso a Dios.

Nunca podemos depender de nuestros propios esfuerzos, sino que debemos dirigirnos al Maestro. Es un gran privilegio si encontramos la verdad en un Maestro que se ha hecho uno con la Divinidad. Sólo tales santos especialmente comisionados pueden llevar a las almas de vuelta a Dios.

Sant Thakar Singh

Es difícil identificar a un verdadero Maestro de la Palabra que pueda llevar el alma de vuelta a Dios. Sin embargo, estos Maestros autorizados tienen ciertas características externas de comportamiento. 

• Se gana la vida y nunca es una carga para nadie. Todos sus ahorros personales, si los tiene, los gasta en socorrer a los necesitados.
• No cobra por impartir instrucciones espirituales. Al contrario, concede la espiritualidad como un don gratuito, como cualquier otro don de Dios, como la luz, el aire y el agua.
• Es la encarnación viva de la humildad. Con todos sus poderes y grandeza, que igualan a Dios, nunca reclama el mérito de nada, sino que lo atribuye todo a Dios o a su Maestro.
• No hace milagros para atraer a la gente y ganarse su credibilidad. Guarda sus tesoros en lo más profundo de su ser. Si la necesidad lo exige, puede hacer uso de sus poderes en alguna ocasión especial.

Véase también el libro gratuito, Godman de Sant Kirpal Singh, disponible gratuitamente en PDF.

El deber del maestro en palabras de Sant Thakar Singh 

No es que un Maestro sea libre después de la iniciación. Él es responsable por ti de llevarte a Dios, lo más elevado, el Innombrable, el octavo plano. Cuando cumple con este deber, entonces el Maestro es libre porque ahora puedes disfrutar y él también disfrutará.

Es importante encontrar un Maestro vivo competente que imparta la conexión interior eterna del alma con Dios y que nos guíe hasta que hayamos alcanzado nuestra meta: la unidad con Dios.

Pero querida mía, hay un compañero de vida que es sólo para glorificarte, para servirte, para darte todo: toda la paz, todo el consuelo - ese es el compañero de vida. Él permanecerá contigo para siempre. Como está dicho: "Ahora estoy contigo hasta la eternidad. Nunca te dejaré ni te abandonaré hasta el fin del mundo". Te guardaré en mi corazón porque tu lugar es mi corazón, tú eres mi corazón. Como también lo sientes por tu hijo. Cuando tienes hijos pequeños, sientes que guardas a tus hijos en tu corazón. Sientes amor por ellos. Aún así, es el amor humano. Pero cuando Dios mismo empieza a amarnos... ¡no te puedes imaginar el amor tan grande que tiene! Dios es amor y el amor es Dios y el que habita en el amor habita en Dios.

Dios tiene que venir disfrazado de ser humano para que se parezca a ti y puedas hablar con él; puedas amarle; puedas tener algo en común con él; puedas escucharle; puedas comer con él; puedas caminar con él y eso te acerque a él. Pero cuando estás cerca de él, también estás cerca de Dios. Como si estuvieras cerca de un cable y lo tocaras, si no hay corriente en el cable, sólo has tocado el cable, pero cuando hay corriente en él no sólo has tocado el cable, también has tocado la corriente eléctrica. Cuando entras en contacto con personas ordinarias, sólo estás con personas ordinarias, no hay ningún efecto sobre ti, nada. No ganas nada. Pero cuando entras en contacto con ese cuerpo, que se parece a otros seres humanos, pero hay Dios en él, despierto y trabajando, entonces de inmediato se produce un gran cambio.

Los Maestros del pasado también han estado dando a la gente las llamadas de sus propios tiempos. Pero la situación de este mundo cambia y por lo tanto el Maestro actual es necesario para decirnos la situación actual, el mensaje actual de Dios, que ahora es dado por Dios. Lo que Dios quiere decir a Sus hijos ahora debe ser dicho por la agencia presente, que está allí conectada con Dios, para que pueda llevar su mensaje del Gran Padre a los hijos, la humanidad.

Sant Thakar Singh